La cuadra

Había una vez un gnomo que se llamaba Ismaíl. Un día vio una casa que tenía una cuadra, y decidió entrar.

Allí dentro había unha chica que se llamaba Fátima. La chica le dijo que no se preocupara, que ella le ayudaría. Pero le hizo prometer dos cosas:

-Serás mi novio y me ayudarás a limpiar la cuadra. ¿Vale?

Entonces, Ismaíl aceptó. Y se ayudaron y se enamoraron, y vivieron felices para siempre.

Una cuadra

[Eloy Carro Barros]

6 comentarios

Miguel dijo...

Elo que cuadra tan sucia y tambien paja






B E

S E

S

Iria dijo...

Hola Eloy donde estaban las cuadras.

Laila dijo...

Así que la cuadra estaba sucia Eloy, menos mal que Fátima le echó una mano, si es que debía ser mucho trabajo para Ismaíl. A lo mejor hoy véis alguna en esa excursión de la que hoy estáis disfrutando.
Buen viaje de ida y mejor retorno.

Oscar y Lorena dijo...

O que romantico. Eloy estás enamorado porfa contesta.Si o no

Alba dijo...

Que bonito es tu cuento es una chupi piruli un abrzo.

Irene y Eloy dijo...

Que cuento tan amoroso . . .